En diferentes partes del país se registran cortes de luz y agua, mientras que algunas líneas ferroviarias funcionan con intermitencias.
En varias regiones de Ucrania se han registrado la mañana de este lunes una serie de ataques contra su infraestructura crítica y energética. Anteriormente, la alerta aérea se activó en todo el territorio ucraniano.
De acuerdo con medios ucranianos, se han registrado unas 10 explosiones en la provincia capitalina y en la propia Kiev. Muchos habitantes de la periferia de la capital se han quedado sin electricidad y sin agua.
El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, confirmó los daños en la infraestructura crítica. "Una parte de la capital está sin energía. En algunas zonas no hay suministro de agua", dijo.
Klichkó también asegura que los ataques dañaron una instalación eléctrica en Kiev que brinda servicio a unos 350.000 apartamentos, así como que cerca del 80% de los residentes de Kiev se han quedado sin suministro de agua.
A su vez, el jefe de la Administración militar de la provincia de Kiev, Alexéi Kuleba, advierte que las infraestructuras energéticas de la región están dañadas, por lo que los residentes deben prepararse para un corte de electricidad prolongado.
Se reporta que los servicios de telefonía móvil están interrumpidos en Kiev y la provincia capitalina.
Sin embargo, según la Administración militar, no se han registrado daños en la capital. En algunos distritos de la urbe no hay luz ni agua debido a los ataques a las instalaciones situadas en la provincia de Kiev.
Además, cohetes han alcanzado una central eléctrica cerca de Svetlovodsk, según las autoridades de la región de Krivoy Rog. No se han registrado víctimas.
Mientras tanto, se ha lanzado un ataque contra la central hidroeléctrica de la ciudad de Novodnestrovsk.
También se registró un ataque contra una subestación eléctrica, cerca de la presa de la Estación Hidroeléctrica Dniéper, en la parte de la región rusa de Zaporozhie, actualmente controlada por las fuerzas ucranianas.
Al mismo tiempo, se informa que la central hidroeléctrica de Kremenchug, en la región de Kirovograd, también está afectada: no hay luz ni agua. La central de Kanevskaia, situada en la región de Cherkasy, ha sido alcanzada por cohetes.
Según las autoridades locales, se lanzaron ataques con misiles contra la ciudad de Járkov y el distrito de Chugúievski, mediante sistemas rusos C-300. "Las instalaciones de infraestructuras críticas han resultado dañadas. Por lo tanto, puede haber apagones. De momento no hay víctimas", dijo el gobernador Oleg Sinegubov.
Además, se informa que las explosiones en Járkov han afectado a infraestructuras críticas, mientras que el metro de la ciudad ha dejado de funcionar.
Los ataques contra una infraestructura crítica en Járkov han provocado la interrupción del servicio de metro, así como trolebuses y tranvías.
Por su parte, el asesor del ministro del Interior de Ucrania, Antón Gerashchenko, afirma que contó 40 misiles sobre Ucrania.
Se confirma la destrucción de las infraestructuras energéticas en la región de Cherkasy. También se están registrado explosiones en las regiones de Rovno, Volyn y Lvov.
Mientras tanto, parte de la región de Cherkasy se ha quedado sin electricidad tras el daño de varias infraestructuras. Además, una instalación energética ha sido dañada en la región de Dnepropetrovsk.
También se reporta que los restos de un cohete interceptado han alcanzado una instalación civil en la región de Vínnitsa, causando daños materiales. Sin embargo, según el gobernador, Serguéi Borzov, no hay víctimas.
Debido a los ataques a las instalaciones eléctricas, algunas líneas ferroviarias han quedado sin energía, por lo que algunos trenes sufren retrasos.
Varias explosiones se han registrado en la ciudad de Pavlograd, región de Dnepropetrovsk, donde se encuentra un nudo ferroviario de importancia estratégica utilizado para suministrar equipamiento a las Fuerzas Armadas del régimen de Kiev en la región rusa del Donbass.
Desde la oficina presidencial de Ucrania informan que se han introducido cortes de energía de emergencia debido al bombardeo de infraestructuras críticas.
El primer ministro del país, Denís Shmygal, informó que 18 instalaciones en 10 regiones resultaron dañadas, la mayoría de ellas eléctricas. Añadió que cientos de asentamientos en 7 provincias están sin energía.