IJNet-Por La
serie The
Implant Files es la primera investigación global que
expone los sucios secretos de las millonarias corporaciones de implantes y
aparatos médicos, envueltas en numerosos escándalos de conflictos de intereses,
corrupción y prácticas abusivas con los pacientes.
La reincidencia de
casos de fabricación de dispositivos sanitarios defectuosos, puestos en el
mercado por la falta de reglas y controles estrictos, ha causado la muerte de
miles personas y puesto en riesgo a millones de usuarios en todo el mundo. Por
eso, el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus
siglas en inglés), convocó a más de 250 reporteros de 36 países para encender
luces en el lado oscuro de la tecnología médica.
No
existe una base de datos oficial que reúna la información global sobre las
alertas de seguridad de los dispositivos médicos defectuosos y el retiro del
mercado de los que causan daños a los pacientes, los periodistas socios del
ICIJ construimos un repositorio útil para todos los usuarios con información
recopilada de distintas fuentes. El buscador permite ahora a los usuarios explorar
más de 77.000 alertas sobre el retiro de productos médicos, avisos y
advertencias de seguridad de fabricantes que fueron realizadas en más de 11
países en esta primera fase.
Como
ICFJ Knight Fellow, he ayudado a asesorar al equipo de periodistas de The
Implant Files de América Latina, incluso de los países México y Perú.
Les presento ahora algunas de las herramientas que seguimos los reporteros de
América Latina para contribuir con The Implant Files:
Más de 1.500 solicitudes de información pública
Para
The Implant Files, los reporteros presentamos más de 1.500 solicitudes de
acceso a la información pública en 36 países y recopilamos más de 8 millones de
registros de salud relacionados con dispositivos médicos. Esto incluyó alertas
de retiro, advertencias de seguridad, documentos legales y financieros de
empresas de tecnología médica.
Reportes de la FDA
El
equipo del ICIJ nos facilitó el acceso a más de 5.4 millones de informes de
eventos adversos enviados a la FDA por las empresas de tecnología médica en la
última década. Estos informes provienen de médicos, fabricantes, pacientes e
incluso abogados, y describen casos en los que se sospecha que un dispositivo
causó o contribuyó a una lesión grave o la muerte, o si ha sufrido una falla de
funcionamiento que probablemente causaría daños si se repitiera.