La mayoría de los Awás ya han sido contactados
pero, según la ONG Survival Internacional, algunos todavía viven aislados en
una zona que está siendo "rápidamente destruida".

En la grabación, de casi un minuto de duración, divulgada por Survival, se observa a un hombre
joven, de pelo corto, con el dorso descubierto y
portando varios collares. En un momento
dado, mientras parece que se comunica con otra persona, agarra
un machete que se encuentra entre los árboles y lo
olfatea. De pronto, algo le pone en situación de alerta, mira hacia la cámara,
se da cuenta de que alguien le está observando y huye enseguida. La otra
persona, que lleva unas lanzas, le sigue, pero la cámara no consigue
visualizarle.
Los indígenas de Guajajara, un pueblo vecino a los AWÁS en el estado de Maranhao, en el este del país, fueron quienes filmaron las imágenes. "Esperamos que este video tenga un resultado positivo y una repercusión internacional con una mirada puesta en la protección de un pueblo, una selva, una nación, una tierra y una historia", declaró a Survival Flay Guajajara, autor de las imágenes y miembro de la asociación Mídia Índia.

"Ellos [los Awás] existen y sus vidas
están en peligro. Por eso usamos esta imagen, para pedir socorro y que las
autoridades protejan la vida de nuestros parientes, que no quieren
contacto", dijo Erisvan.
"Familias masacradas"
La mayoría de los Awás, que durante
décadas han sido blanco de ganaderos y madereros ilegales que han invadido sus
tierras, ya han sido contactados pero, según la ONG, algunos todavía viven
aislados en una zona que está siendo "rápidamente destruida". El
video es una prueba de la existencia de estas personas no contactadas. Un
grupo conocido como los 'Guardianes Guajajaras' se
encarga, junto a Survival International, de vigilar la selva y defender a
los Awás, pero muchos, advierte la organización, "han recibido amenazas de
muerte y algunos han sido asesinados".

"Bolsonaro y sus amigos"
"Un vistazo a una foto satelital muestra
el tamaño del peligro que corren. Los madereros ya han
matado a muchos de sus familiares y han obligado a
otros a salir del bosque", advierte Stephen Corry,
director de Survival International, quien añade que "a Bolsonaro
[presidente de Brasil] y a sus amigos de las industria maderera bien que les
gustaría ver eliminados a aquellos que sobreviven. Tan solo una oleada de
indignación global los separa del genocidio".

También Greenpeace alerta que "en
solo seis meses de gestión, Bolsonaro ya colecciona retrocesos
gigantescos (...) y el actual gobierno representa
una amenaza para el equilibrio climático". El
pasado mes de junio, la deforestación de la Amazonía brasileña aumentó un
88 % en comparación con el mismo mes del año pasado. Unos
datos que, según el ultraderechista, que compara a los indígenas que viven
en reservas protegidas con animales de zoológicos, son mentira.
Marta Miera