El Pontífice dijo que
había que compartir la ternura con los enfermos, los presos, los ancianos y las
familias en dificultades.
PL. - ANSUR. - En la
plaza de la Revolución Calixto García y ante miles personas, el Sumo Pontífice
renovó su mensaje a favor de los más desfavorecidos, como es habitual en su
prédica desde que se convirtió en la máxima figura de la Iglesia católica en marzo
de 2013.
El Obispo de Roma instó a las personas a ver
más allá de las apariencias, del pecado, del fracaso, de la indignidad, o de la
categoría social, y mirar lo más auténtico que vive en cada persona.