Sazonar y condimentar las papas fritas: cuándo y cómo.
Por; PEIO GARTZIA - EROSKI CONSUMER. - El último punto es esencial: las papas fritas (también las asadas) se deben sazonar siempre al final, una vez doradas, calientes y justo en el momento de servir. De esta manera, los granos de sal se adhieren a la superficie ya dorada y cocinada. Si las papas se salan antes o durante la fritura, la sal penetra en ellas y se deshace, con lo que las papas no quedan tersas, ni crujientes, ni enteras. Además, si se salan durante la fritura, parte de la sal caerá en el aceite caliente, se irá al fondo de la sartén o de la freidora y degenerará más rápido el aceite de la fritura, con lo que se harán unas frituras posteriores de menor calidad.
La sal normal dará un toque conocido, pero... ¿por qué no probar otro tipo de sales que hay en la actualidad en el mercado? Se pueden emplear sales con sabor a limón, sales en escamas con pimentón mezclado, sales negras ... Cualquiera de estas opciones (con moderación, claro) es una manera de experimentar y divertirse comiendo un producto más que conocido, como las papas fritas.
Además, es posible dar otro toque a las papas, pues la sal no es el único elemento sazonador que se puede utilizar. Se pueden sazonar con una mezcla de hierbas frescas y recién troceadas -como romero o albahaca- o una cucharadita de pimentón con un toque ahumado, pimentón dulce o picante, pimientas de cinco bayas recién molidas o hasta ajo seco. Y qué decir de toques más exóticos como una mezcla de sal y curry, o sal y pimienta blanca, cayena o hasta nuez moscada. Todas ellas pueden ser mezcladas entre sí y admiten un toque silvestre, si se le añade un poquito de tomillo, orégano o romero.
Elegir buenas papas y cortarlas bien
¿Cómo hacer unas papas fritas perfectas? Entre las claves para un buen resultado destacan la elección del tipo de papa, el aceite de fritura, el tipo de corte de la papa y, como ya se ha visto, su posterior sazonamiento.
- Qué tipo de papa comprar. El tipo de papa es fundamental. Más allá de enumerar la gran cantidad de tipos que hay en el mercado, hay que guiarse por el aspecto. La piel lisa, sin tallos, casi brillante, indicará que es una papa de ese año, fresca y con buen sabor. Luego, si el distribuidor indica en la etiqueta que ese tipo de papa es más adecuada para freír que para asar o cocer, pues mejor.