Lo que hemos vivido los últimos días en Honduras merece un análisis mucho más profundo, pero a modo de reflexión preliminar y síntesis, podemos decir que la voluntad mayoritaria de refundar el país manifestada por el pueblo hondureño ha sido cercenada por las élites políticas y económicas. Todo ello además sufriendo un nivel de injerencia por parte de la Embajada de Estados Unidos nunca visto antes.
Genealogía de un fraude
En las calles hondureñas no se tiene ninguna duda de que Libre ganó las elecciones y ha sido víctima de un fraude cometido mediante una estrategia perfectamente organizada y diseñada por JJ Rendón y la Embajada de Estados Unidos. Si en algún momento llegamos a creer en la victoria de Libre, este golpe de estado electoral dado el domingo y televisado en directo nos devuelve a la realidad y demuestra que a veces la izquierda peca de inocencia y la derecha está perfectamente articulada tanto a nivel de medios como en el plano internacional.