Nuevas olas de calor amenazan
la salud de América del Sur
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© UNICEF-Giacomo Pirozzi. Niño en la zona del amazonas en Brasil. El calor puede causar síntomas graves, como el golpe de calor. |
ONU - El año 2019 cierra una década
de temperaturas cálidas extremas con 24 países en las
Américas que han emitido alertas por olas de calor. Los pronósticos anticipan
la recurrencia de estos fenómenos en América del Sur entre diciembre y marzo de
2020, por lo que la Organización Panamericana de la Salud (OPS)
instó a los países de América del Sur a prepararse ante el posible impacto en
la salud de los ciudadanos, que puede tener consecuencias mortales.
En un comunicado, la OPS asegura que durante
el verano austral se esperan olas de calor que pueden
aumentar el malestar, reducir la disponibilidad de agua, y contribuir al
incremento del riesgo de incendios forestales y la pérdida de cultivos. Además,
pueden causar cortes de energía eléctrica, reduciendo el acceso a ventilación,
refrigeración y aire acondicionado.
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OMMUna niña juega en unas fuentes para aliviar el calor del verano. |
Planes de contingencia
La Organización recomienda al sector salud y a
las agencias de meteorología de los países en desarrollo que, en sus planes de
contingencia por olas de calor, determinen la probabilidad e intensidad del
impacto en la población, emitan alertas e implementen acciones de
respuesta de acuerdo con la amenaza.
También asegura que los países deben fortalecer
la vigilancia epidemiológica de la morbilidad y mortalidad asociada al calor y
mejorar la capacidad de los servicios de salud a través de capacitación de
personal, mejoras en el diseño de hospitales y equipamiento de centros de salud
en zonas de mayor riesgo.
Asimismo, las autoridades deben informar
oportunamente a través de medios de comunicación sobre las posibles olas de
calor y medidas de adaptación, prevención y autocuidado.
La OPS señaló que algunos países ya han
avanzado en esta preparación, pero que el conocimiento de los riesgos es aún
limitado y se necesita aumentar la capacidad de respuesta. Es por ello que
ha publicado
una guía para apoyar a las naciones en el
desarrollo de sus planes de contingencia.
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UN Photo-Eskinder DebebeJóvenes en el bosque nacional Tapajós, en Brasil, nadan refrescándose del intenso calor. |
Efectos del calor en la salud
Las personas que tienen mayor riesgo de
complicaciones y muerte durante una ola de calor son los
niños, los adultos mayores, y aquellas que tienen
enfermedades crónicas y requieren medicación diaria.
La mayoría de los fallecimientos se deben al
agravamiento de enfermedades infecciosas o crónicas (cardiopulmonares, renales,
endocrinas y psiquiátricas). El calor puede causar síntomas graves, como el
golpe de calor, causado por la incapacidad del cuerpo para regular la
temperatura, en el que la persona presenta piel seca, roja y caliente, pulso
rápido y fuerte, náuseas, calambres y pérdida del conocimiento. Un golpe de
calor puede llevar al coma y la muerte.
Otros síntomas incluyen: edemas en miembros
inferiores, erupción en el cuello por calor, calambres, dolor de cabeza,
irritabilidad, letargo y debilidad.
La respuesta al calor depende
de la capacidad de adaptación de cada persona y los
efectos graves pueden aparecer repentinamente, por lo cual es muy importante
estar atentos a las alertas y recomendaciones de las autoridades locales.
En 2019, las olas de calor han afectado a
Australia, Canadá, Estados Unidos, varios países de Europa, India, Pakistán y
Japón; así como a Argentina, Bahamas, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia,
Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Honduras, Guatemala,
Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana,
Venezuela, y Uruguay.
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Noticias ONU-Laura Quiñones.Un iceberg flota en el Canal Upsala, en Punta Bandera, Argentina. |
Otras recomendaciones de la OPS
• Informarse sobre alertas y predicciones
meteorológicas.
• Evitar exponerse al sol durante las horas de
mayor calor.
• No dejar niños o ancianos
desatendidos en vehículos estacionados.
• Evitar hacer ejercicios o actividades intensas
al aire libre sin protección.
• Consumir agua cada dos horas, aún
sin tener sed.
• Tomar duchas o baños fríos en sitios seguros
(evitando corrientes de agua fuertes).
• Mantener las viviendas
frescas cubriendo las ventanas durante el día y usando aire
acondicionado o ventilador en las horas de más calor.
• Si tiene enfermedades crónicas y usa
medicamentos, consultar con un médico.