No es una pregunta sencilla, pero si pensamos un rato este acertijo puede solucionarse y es que ambas magnitudes pueden representarse mediante dígitos.Mediante seis dígitos, concretamente.
Así como una hora concreta puede ser las 19:30:45 (las siete y media y 45 segundos), un color también puede ser identificado mediante un código numérico: de hecho el color #193045 existe y según la clasificación hexadecimal es un tono de azul oscuro.
De la misma forma, el color #144510, que es un verde oscuro, puede convertirse en las 14:45:10, una hora determinada del día.
Cada hora, minuto y segundo se puede representar con un color diferente. ¿Imaginas pintar un arcoiris enorme con los colores que corresponden a las 24 horas del día?

Cada segundo, el código de la hora cambia: 17:30:01, 17:30:02, 17:30,03, 17:30:04… y cada código a lo largo del día (diferentes todos ellos) es un color diferente: el color #173001, el #173002, el #173003 y así sucesivamente, desde la hora 00:00:01 hasta las 23:59:59, terminando y comenzando el ciclo en el color #000000, las doce en punto de la noche, que es el negro absoluto.

A partir de ahora, cuando quieras saber qué hora es puedes preguntar por el color del momento. “¿Qué color es ahora?”, “¿a qué color habíamos quedado?”