Centro Knight .- Por Teresa Mioli/SH.- La mayoría de los países de América Latina y el Caribe experimentaron una disminución en la libertad de prensa de 2014 a 2015, de acuerdo con un índice recientemente publicado por Reporteros Sin Fronteras (RSF).
La organización sin ánimo de lucro con sede en París que defiende la libertad de expresión y promueve el periodismo publicó la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2016 este 20 de abril.
RSF señaló que “la situación de la libertad de prensa se deterioró en 2015 en el continente americano. ¿La razón? Las crecientes tensiones políticas en numerosos países, alimentadas por la recesión económica, la incertidumbre sobre el futuro y los repliegues comunitarios”.
Los países de la región en las peores posiciones fueron Cuba (171) y México (149). Los mejor ubicados fueron Costa Rica (6), Jamaica (10) y Uruguay (20).
Sobre Costa Rica, la organización dijo que “con una legislación muy favorable para la prensa y un verdadero reconocimiento de la profesión de periodista, es el único país de Centroamérica que no padece altos índices de corrupción y las consecuencias que estos engendran en el acceso a la información”.
En su análisis de región, RSF mira cuáles son las principales amenazas para la libertad de prensa para establecer la puntuación de cada país.
Apuntó a la violencia institucional en Venezuela y Ecuador, al crimen organizado en Colombia y América Central, a la corrupción en Brasil y a la concentración en la propiedad de los medios en Argentina.
La organización también registró la relación entre periodistas asesinados, corrupción y tráfico de drogas en México; la violencia de los carteles y el conflicto con el gobierno de El Salvador; y el acceso limitado a la información y acciones legales contra periodistas en Panamá. Los gobiernos restrictivos de Venezuela y Cuba también fueron mencionados.
En la clasificación, la organización asigna puntos a cada país en función del “nivel general de violaciones a la libertad de prensa”. Como explicó, “entre más elevado sea el índice, peor es la situación”.
Para hacer la clasificación, RSF dijo que utiliza datos cuantitativos sobre abusos y violencia contra periodistas, junto a datos cualitativos basados en las respuestas a encuestas sobre pluralismo, independencia de los medios, ambiente en el que los periodistas llevan a cabo su trabajo y autocensura, marco legal, transparencia y calidad de la infraestructura de producción de noticias. Profesionales de los medios, abogados y sociólogos reciben el cuestionario, según la organización.
La disminución de la libertad de prensa que la organización registró en el continente americano no se limita a esa región. RSF dijo que el índice “muestra que existe un profundo y preocupante deterioro de la libertad de prensa” tanto “del índice mundial y de los índices de todos los continentes”.
Entre 2013 y 2016, la organización dijo que se presentó un deterioro de 13,6 por ciento en el índice mundial de la libertad de prensa.