
Además,
ha sido multado con 20.000 rublos (300 euros) al no contar del
permiso del Ayuntamiento en la que ha sido la mayor manifestación
contra el gobierno de los últimos quince años.
"La
gente está descontenta con la corrupción y por eso decidieron
participar en la manifestación pacífica", aseguró durante la
vista judicial el opositor, que fue detenido en el centro de la
capital antes de que se iniciara el acto.
Navalni
destacó que durante los tres días anteriores a la protesta del
domingo, el Ayuntamiento moscovita no ofreció ningún lugar
alternativo en la ciudad para celebrar la manifestación contra la
corrupción.
Por
su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri
Peskov,
ha declarado que quienes aseguraron que las manifestaciones de ayer
no infringían la ley cometieron "una
provocación y una falsedad", porque las autoridades rusas
habían propuesto dos lugares alternativos para esa concentración
moscovita, pero los organizadores los rechazaron, con lo cual "las
personas arrastradas se encontraban en un lugar no autorizado".
