El
doctor Ranga-Ram Chary, que trabaja en el Instituto de Tecnología de
California examinó los datos sobre las fuentes de microondas
espaciales recobrados por el telescopio orbital Planck de la Agencia
Espacial Europea.
actualidad.rt - Al excluir las ondas electromagnéticas provenientes de las galaxias, los cuásares y las nubes de gas conocidos, el astrofísico se centró en estudiar el brillo que se suele atribuir a los primeros instantes posteriores al Big Bang.
Según explicó Chary, en el mapa del fondo espacial se aprecian varias zonas desde donde las microondas llegan con un brillo mucho más intenso de lo que se podría esperar. Unas manchas lúcidas y otras oscuras le hacen pensar al investigador que a un lado de este mundo de las galaxias que habitamos hay una realidad comparable con él en tamaño y energía. Ello se asemeja a dos burbujas que se rozan o colisionan entre sí, dice la revista 'New Scientist'.