La fiebre es un motivo muy frecuente de consulta en cualquier nivel asistencial, aunque la mayoría de veces está provocada por infecciones leves
EROSKI CONSUMER-Por MONTSE ARBOIX.- No es de extrañar que un simple resfriado o cualquier otra infección viral provoquen en los niños décimas de fiebre, incluso fiebre alta. Pese a que pocas veces causa más trastorno que decaimiento general en los más pequeños, es un signo clínico que preocupa a los progenitores. Tanto que, a pesar de que en la mayoría de los casos no reviste gravedad, es el motivo de consulta más frecuente en todos los niveles asistenciales, sea en atención primaria como en los servicios de urgencias. A continuación se describe qué función tienen la fiebre, cuándo se considera que hay que llevar el niño al médico y cómo actuar ante una convulsión febril.
EROSKI CONSUMER-Por MONTSE ARBOIX.- No es de extrañar que un simple resfriado o cualquier otra infección viral provoquen en los niños décimas de fiebre, incluso fiebre alta. Pese a que pocas veces causa más trastorno que decaimiento general en los más pequeños, es un signo clínico que preocupa a los progenitores. Tanto que, a pesar de que en la mayoría de los casos no reviste gravedad, es el motivo de consulta más frecuente en todos los niveles asistenciales, sea en atención primaria como en los servicios de urgencias. A continuación se describe qué función tienen la fiebre, cuándo se considera que hay que llevar el niño al médico y cómo actuar ante una convulsión febril.
En la mayoría de los casos, la fiebre es una respuesta a una infección producida por un virus o por una bacteria y no provoca mayores trastornos (solo un pequeño porcentaje puede corresponder a una infección grave), si se controla con antitérmicos en las dosis adecuadas y se acompaña de medidas físicas.
La fiebre es una respuesta a una infección y en la mayoría de los casos no provoca mayores trastornos