Una gota de agua es poderosa.
Una gota de agua es más necesaria que nunca.
Una gota de agua es más necesaria que nunca.
El agua es un elemento esencial del desarrollo sostenible.
Los recursos hídricos, y la gama de servicios que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.
El agua propicia el bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad alimentaria y energética, la salud humana y al medio ambiente.
En
la actualidad más de 663 millones de personas viven sin suministro
de agua potable cerca de casa, lo que les obliga a pasar horas
haciendo cola o trasladándose a fuentes lejanas, así como a hacer
frente a problemas de salud debido al consumo de agua contaminada.
«¿Por qué desperdiciar agua?»
Este
año, nos concentramos en el desperdicio del agua y en cómo reducir
y reutilizar hasta un 80% del agua que malgastamos en nuestras casas,
ciudades, industrias y agricultura y que fluye de vuelta a la
naturaleza, contaminando el medio ambiente y perdiendo nutrientes
valiosos.
Necesitamos
aumentar la recolección y tratamiento de las aguas residuales y
reciclarlas de una forma segura. Al mismo tiempo, necesitamos reducir
la cantidad de agua que contaminamos y malgastamos para ayudar a
proteger el medio ambiente y los recursos hídricos.
El Objetivo
de Desarrollo número 6 Garantizar
la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento
para todos, incluye una meta de reducir a la mitad la proporción de
agua dilapidada y aumentar su reciclaje.
Datos destacados
- Mundialmente, más del 80% de las aguas residuales que generamos vuelve a los ecosistemas sin ser tratada ni reciclada.
- 1800 millones de personas usan una fuente de agua contaminada por material fecal, poniéndolas en riesgo de contraer el cólera, la disentería, el tifus o la polio. El agua no potable, y unas pobres infraestructuras sanitarias, así como la falta de higiene, causa alrededor de 842 000 muertes al año.
Saru Saud, de 7 años, bebe agua en la comunidad en la empobrecida aldea de Biraltoli, en el distrito de Achham, en la región de Far-Western, en Nepal. Foto: UNICEF/NYHQ2012-2002/SHEHZAD NOORANI |
El Día
Mundial del Agua está
coordinado por UN- AGUA,
un mecanismo de colaboración de la ONU para rmas relacionados con el
agua potable en el que participan gobiernos y otras
Antecedentes
El
Día Mundial del Agua se celebra anualmente el 22 de marzo como un
medio de llamar la atención sobre la importancia del agua dulce y la
defensa de la gestión sostenible de los recursos de agua dulce.
Cada
año, el Día Mundial del Agua destaca un aspecto particular
relacionado con el agua.
La
creación de un día internacional dedicado al agua fue recomendado
durante la Conferencia
de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo
(CNUMAD) de
1992 en Río de Janeiro.
La Asamblea General de las Naciones Unidas
respondió a dicha recomendación designando el 22 de marzo de 1993
como el primer Día Mundial del Agua.
Nueva
planta de tratamiento de aguas residuales de Nicosia.
Foto: PNUD en
Chipre
|
La
Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó el 22 de diciembre de
1992 la resolución A/RES/47/193 por
la que el 22 de marzo de cada año fue declarado Día Mundial del
Agua, a celebrarse a partir de 1993, en conformidad con las
recomendaciones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el
Medio Ambiente y el Desarrollo contenidas en el Capítulo
18 (Recursos
de Agua Dulce) del Programa 21.
Se
invitó entonces a los diferentes Estados a consagrar este día, en
el marco del contexto nacional, a la celebración de actividades
concretas como el fomento de la conciencia publica a través de la
producción y difusión de documentales y la organización de
conferencias, mesas redondas, seminarios y exposiciones relacionadas
con la conservación y desarrollo de los recursos hídricos así como
con la puesta en práctica de las recomendaciones del Programa
21.
¿Por qué un Día Mundial del Agua?
El
22 de marzo es una oportunidad de aprender más sobre temas
relacionados con el agua, sirve de inspiración para compartir los
problemas relacionados con el agua y tomar medidas para cambiar la
situación.
El Día se remonta a la Conferencia de las Naciones
Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de 1992 en la que se
propuso declarar una fecha dedicada a este asunto. La Asamblea
General decidió designar el 22 de marzo de 1993 como el primer Día
Mundial.
Cada año, ONU-Agua, la entidad que coordina el trabajo de
la Organización sobre el agua y el saneamiento, establece un tema
para el Día correspondiente a un desafío actual o futuro.