Los datos de MUSE ofrecen información sobre una aislada estrella de neutrones que se encuentra más allá de nuestra galaxia.
ESO.- Nuevas imágenes del VLT (Very Large Telescope) de ESO, en Chile, y de otros telescopios, revelan un rico paisaje de estrellas y nubes brillantes de gas en una de nuestras galaxias vecinas más cercana, la Pequeña Nube de Magallanes.Las imágenes han permitido a los astrónomos identificar un esquivo cadáver estelar enterrado entre filamentos de gas, fruto de una explosión de supernova de hace 2.000 años. Se utilizó el instrumento MUSE para establecer dónde se esconde este escurridizo objeto, y los datos del Observatorio de rayos X Chandra confirmaron su identidad: es una estrella de neutrones aislada.
Esta fotografía, creada a partir de imágenes de telescopios tanto terrestres como espaciales, cuenta la historia de la persecución de un escurridizo objeto, difícil de encontrar, y oculto en medio de una compleja maraña de filamentos gaseosos en una de nuestras galaxias vecinas más cercana, laPequeña Nube de Magallanes. La imagen rojiza de fondo proviene del Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA y revela las volutas de gas que forman la remanente de supernova 1E 0102.2-7219 en tonos verde. El anillo rojo con el centro oscuro es del instrumento MUSE, instalado en el VLT (Very Large Telescope) de ESO, y las imágenes azules y púrpuras son del Observatorio Chandra de rayos X de la NASA. El punto azul del centro del anillo rojo es una estrella de neutrones aislada con débil campo magnético, la primera identificada fuera de la Vía Láctea. Crédito: ESO/NASA, ESA and the Hubble Heritage Team (STScI/AURA)/F. Vogt et al. |
Estas
espectaculares nuevas fotografías, creadas a partir de imágenes de
telescopios tanto terrestres como espaciales [1],
cuentan la historia de la persecución de un escurridizo objeto,
difícil de encontrar, y oculto en medio de una compleja maraña de
filamentos gaseosos en la Pequeña
Nube de Magallanes,
a unos 200.000 años luz de la Tierra.
Nuevos
datos del instrumento
MUSE,
instalado en el VLT (Very Large Telescope) de ESO, en Chile, han
revelado la existencia de un destacado anillo de gas en un sistema
llamado 1E 0102.2-7219. Este anillo se expande lentamente en las
profundidades de numerosos filamentos de gas y polvo, que se mueven a
gran velocidad, y que son los restos de una explosión de supernova.
Este descubrimiento ha permitido que un equipo, dirigido por Frédéric
Vogt (miembro del programa “Fellow”
de ESO en Chile), haya localizado, por primera vez, una estrella
de neutrones aislada
con bajo campo magnético y situada más allá de nuestra propia
galaxia, la Vía Láctea.
Esta imagen de archivo del Observatorio Chandra de rayos X de la NASA, muestra cómo se detectó la presencia de un objeto escurridizo, oculto en medio de una compleja maraña de filamentos gaseosos, en una de nuestras galaxias vecinas más cercana, la Pequeña Nube de Magallanes. Destaca de manera impresionante la remanente de la supernova 1E 0102.2-7219, pero, al combinarla con los datos de MUSE, se demuestra que el punto azul justo debajo del centro, es una estrella de neutrones aislada con débil campo magnético, la primera identificada fuera de la Vía Láctea. Crédito: ESO/NASA |
El
equipo detectó que el anillo estaba centrado en una fuente de rayos
X que
había sido observada años antes y designada como p1.
La naturaleza de esta fuente había seguido siendo un misterio. En
particular, no estaba claro si p1 estaba
realmente dentro del remanente o detrás de él. Finalmente, cuando
MUSE observó el anillo de gas —que incluye neón y oxígeno— el
equipo científico distinguió perfectamente que p1 estaba
rodeada por un círculo. La coincidencia era demasiado grande, y se
dieron cuenta de que p1 debía
encontrarse en el interior del propio remanente de supernova. Una vez
conocida la ubicación de p1,
el equipo utilizó observaciones de este objeto en rayos X realizadas
por el Observatorio
Chandra de rayos X para
determinar que se trataba de una estrella de neutrones aislada con un
campo magnético bajo.
Esta fotografía del Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA es el escenario en el que se desarrolla la historia de la persecución de un escurridizo objeto, difícil de encontrar, y oculto en medio de una compleja maraña de filamentos gaseosos en una de nuestras galaxias vecinas más cercana, laPequeña Nube de Magallanes. Las volutas de gas que forman el remanente de la supernova 1E 0102.2-7219 se ven en azul cerca del centro de la imagen. En la parte inferior derecha, en tonos verdes y rosas, puede verse parte de la gran región de formación estelar N 76, también conocida como Henize 1956. Crédito: NASA, ESA and the Hubble Heritage Team (STScI/AURA) |
En
palabras de Frédéric Vogt: “Si
estás buscado una fuente puntual, lo mejor que te puede pasar es que
el universo, literalmente, dibuje un círculo alrededor de él para
mostrarte dónde has de buscar”.
Cuando
las estrellas masivas explotan como supernovas, dejan atrás una red
cuajada de gas caliente y polvo, conocida como remanente de
supernova. Estas turbulentas estructuras son clave para la
redistribución de los elementos más pesados —fabricados por las
estrellas masivas a medida que viven y mueren— en el medio
interestelar, donde, con el tiempo, acabarán formando nuevas
estrellas y planetas.
Las
estrellas de neutrones aisladas con bajos campos magnéticos
normalmente apenas tienen unos diez kilómetros de tamaño, pero
pesan más que nuestro Sol y se cree que son abundantes a través del
universo, aunque son muy difíciles de encontrar porque sólo brillan
en longitudes de onda de rayos X [2].
El hecho de observaciones ópticas hayan permitido confirmar
que p1 es
una estrella de neutrones aislada resulta particularmente
emocionante.
La
coautora Liz Bartlett (también miembro del programa “Fellow”
de ESO en Chile), resume este descubrimiento: “Este
es el primer objeto de su clase confirmado más allá de la Vía
Láctea, y ha sido utilizando MUSE como herramienta de guía. Creemos
que esto podría abrir nuevos cauces de descubrimiento y estudio de
estos escurridizos restos estelares”.
Notas
[1]
La imagen combina los datos del instrumento MUSE, instalado en el VLT
(Very
Large Telescope)
de ESO, en Chile, y de los telescopios espaciales Hubble
(Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA) y
el Observatorio
Chandra de rayos X de
la NASA.
[2]
Las estrellas de neutrones giratorias y altamente magnéticas se
llaman púlsares.
Emiten de forma potente en radio y en otras longitudes de onda y son
fáciles de detectar, pero son sólo una pequeña fracción de todas
las estrellas de neutrones cuya existencia se ha predicho.
Información
adicional
Este
trabajo de investigación se ha presentado en el artículo científico
titulado “Identification of the central compact object in the young
supernova remnant 1E 0102.2-7219”, por Frédéric P. A. Vogt et
al., y se ha presentado en la revista Nature
Astronomy.