"Las
células cutáneas se pueden bioimprimir empleando como 'biotinta' rica en
nutrientes plasma sanguíneo humano, fácil de obtener de los tripulantes de una
misión", explicó Nieves Cubo, de la TUD, según el comunicado difundido hoy
por la ESA.
Como
el plasma tiene una consistencia muy fluida, los científicos desarrollaron una
receta modificada añadiendo metilcelulosa y alginato para incrementar la
viscosidad del sustrato, con el fin de poder utilizarlo en las condiciones de
gravedad alterada, señaló.
Precisó
que para producir muestras de hueso se imprimieron células madre humanas con
una composición de biotinta similar, añadiendo un cemento óseo de fosfato de
calcio como material de soporte estructural, que después se absorbería durante
la fase de crecimiento".
Tommaso
Ghidini, director de la división Estructura, Mecanismos y Materiales de la ESA,
que supervisa el proyecto, recordó que un viaje a Marte u otros destinos
interplanetarios implicará pasar varios años en el espacio y que no existirá la
opción de regresar antes de lo previsto en caso de una emergencia médica.
Tampoco será posible transportar suministros
médicos suficientes para hacer frente a cualquier eventualidad, por lo que la
bioimpresión 3D podría
ser la manera de responder a las urgencias médicas, subrayó.
Así, "en el caso de quemaduras, por
ejemplo, se podría bioimprimir piel nueva en lugar de injertarla desde otra
parte del cuerpo del astronauta, lo que provocaría una lesión secundaria que no
sería fácil de curar en el entorno orbital", señaló.
También
en el caso de fracturas óseas, cuya probabilidad es mayor en la ingravidez del
espacio o en la gravedad parcial de Marte, que es 0,38 veces la de la Tierra,
podría insertarse hueso de sustitución en las áreas dañadas, explicó.
"En
todos los casos, el material bioimpreso procedería del propio astronauta, por
lo que no habría problemas de rechazo", agregó.
Al
mismo tiempo, expresó su esperanza de que el trabajo que están llevando a cabo
en el marco de este proyecto para su aplicación en misiones espaciales
"también contribuirá a su avance en la Tierra, acelerando su
disponibilidad y haciendo que llegue a la gente antes".
En
el proyecto participan además del Centro de Investigación de Hueso,
Articulaciones y Tejidos Blandos de la TUD, la alemana OHB System como
contratista principal y el especialista en ciencias de la vida Blue Horizon.