
Los vestigios más antiguos de ovejas domesticadas en China fueron hallados en las provincias de Gansu y Qinghai, en el noroeste del país, y datan de hace entre 5.600 y 5.000 años. La cría de ovejas se extendió del oeste al este a lo largo de la cuenca del río Amarillo, explicó un investigador del Instituto de Arqueología de la Academia China de Ciencias Sociales, Yuan Jing.
Mientras tanto, la primera cabra domesticada encontrada en China se halló en el yacimiento de Erlitou, en la provincia central china de Henan, y data de hace unos 3.700 años, indicó Yuan, quien centra su trabajo en la arqueología animal.
Está comúnmente aceptado en los círculos académicos internacionales que las ovejas y las cabras domesticadas tienen su origen en la zona que actualmente es Irán hace unos 10.000 años.

"Después de eso, parece que nuestros antepasados no domesticaron ningún otro animal durante mucho tiempo", explicó el investigador.
Las pruebas de ADN demostraron que las ovejas chinas tienen un vínculo genético cercano con las que primero aparecieron en el oeste de Asia.
"Así que las ovejas domesticadas fueron introducidas en China desde el oeste de Asia a través de un camino mucho antes de la llamada Ruta de la Seda", apuntó Yuan.