Stalingrado, una de las mayores batallas terrestres de la
historia, es uno de los episodios más dolorosos de la historia de la Gran
Guerra Patria (Rusia). El ejército soviético consiguió defender la ciudad
frente al asedio nazi, pero a costa de unos 1,1 millones de vidas.
actualidad.rt - La batalla de Stalingrado duró 200 días, del 17 de julio de
1942 hasta el 2 de febrero de 1943, y superó a todas las batallas anteriores de
la Segunda Guerra Mundial por duración y por cantidad de soldados y técnica
militar implicada: más de 2 millones de efectivos, 2.000 tanques, 2.000 aviones
y 26.000 piezas de artillería.
Hasta el 23 de agosto, solo un cuarto de la población
(445.000 personas) había abandonado Stalingrado, pues hasta el último momento
los habitantes estaban seguros de que la ciudad no sería ocupada. Durante el
primer mes de resistencia tenaz, la gente consiguió preparar más de 2.800
kilómetros de obras defensivas, 2.730 trincheras y 1.880 kilómetros de
obstáculos antitanque, lo que permitió detener al enemigo hasta la llegada de
tropas adicionales.
Tras ocho meses de durísimos combates casa por casa el
ejército soviético logró la victoria. La derrota de los nazis en esta batalla,
que fue crucial para el devenir de la guerra, cambió la distribución de
fuerzas: disminuyó la influencia de Alemania en sus aliados y reforzó
considerablemente la coalición antihitleriana, ya que si en junio de 1941 esta
consistía de 15 países, a finales de 1943 era de 36.
En noviembre de 1943, en la conferencia de dirigentes de las
tres potencias aliadas en Teherán, el primer ministro de Gran Bretaña, Winston
Churchill, entregó a la URSS un regalo del rey Jorge VI, una espada en honor de
la victoria sobre los invasores fascistas. En ambos lados de la hoja de la
espada estaba inscrito en ruso e inglés: "A los
ciudadanos de Stalingrado, fuertes como el acero, en señal de la admiración
profunda del pueblo británico". En 1965, cuando la Unión
Soviética celebraba el 20 de la victoria sobre los nazis, la ciudad recibió el
título de la ciudad héroe.