A principios de este mes, la empresa suiza de semillas y
agroquímicos Syngenta rechazó la segunda oferta de compra por parte de Monsanto
en un año, alegando que "infravalora" las perspectivas de la
compañía. Pero el gigante de la biotecnología no se da por vencido y aspira a
crear un cuasi monopolio en el mercado alimentario mundial.
"Este 'gigante combinado' se convertiría en la empresa química de semillas y cultivos más grande del mundo con más de 30.000 millones de dólares de ingresos y un control de más del 35% del suministro mundial de semillas. Dominaría un mercado que incluye a otros grandes jugadores como BASF SE, Bayer AG y Dow Chemical Co.", sostiene el experto.
Multitud de críticos sostienen que esta fusión se traduciría
en un cuasi monopolio en el sistema alimentario mundial. Loki indica que esta
unión "podría conducir a una reorganización de los 'grandes' de la
agricultura: con Monsanto solidificando su posición, la compañía Dow Chemical
Co. finalmente podría liquidar su unidad de agricultura, una medida que ya ha
sido sugerida por su director ejecutivo Andrew Liveris" y que puede
despertar el interés de la estadounidense DuPont, una de las empresas químicas
más grandes del planeta, "con respecto a su negocio pionero de
semillas".
El movimiento global SumOfUs ha lanzado una petición pública
instando a los reguladores antimonopolio de EE.UU. y la UE a que bloqueen el
intento de adquisición de Monsanto. "Imagine: Monsanto elimina a uno de
sus mayores competidores y refuerza su control sobre el sector agrícola global
(…) nuestra preciosa fauna sufre con la extensión de pesticidas. Cada vez más
agricultores son intimidados si se niegan a comprar semillas de Monsanto",
escriben.
Mientras que la fusión puede tener sentido financiero para
Monsanto (además de una cuota de mercado agregada, pudiendo recurrir a Suiza
para una reducción de impuestos), sostiene Loki, su clientela principal se
encontraría en el lado perdedor del tablero: los agricultores enfrentan
constantemente un aumento de los precios de semillas y plaguicidas. "Esto
daría al monstruo de Monsanto un férreo control sobre los agricultores del mundo
amenazando gravemente la seguridad alimentaria mundial", sostiene Kaytee
Riek, director de la campaña de SumOfUs.