Paro convocado por sindicatos y una fracción del movimiento indígena une a esos grupos con sectores de derecha. Foto: Andes |
Las movilizaciones a
las que han llamado estos sectores de la oposición, que aseguran defender ideas
progresistas, recibieron la semana pasada el apoyo del banquero Guillermo
Lasso, uno de los principales líderes que tiene actualmente la derecha del país
andino y quien fue en su momento parte del gobierno de Jamil Mahuad en el que
estalló la peor crisis financiera de las últimas décadas.
Andes.- ANSUR - El
pasado 31 de julio, Lasso dijo a la prensa que el 13 de agosto (día del paro
sindical) los simpatizantes de su movimiento estarán en las principales
capitales provinciales protestando contra varias iniciativas del gobierno,
entre ellas las enmiendas constitucionales.
El movimiento indígena
de oposición ha criticado que se establezcan puentes con sectores de derecha.
En mayo, la dirigencia de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del
Ecuador (Conaie) censuró las pretensiones de los líderes de Pachakutik, su brazo
político, de reunirse con representantes del movimiento Creo (encabezado por el
banquero Guillermo Lasso); Sociedad Patriótica (liderado por el derrocado
presidente Lucio Gutiérrez); y el movimiento País Libre.
La Conaie rechazó ese
hecho y exigió por medio de un comunicado a la Dirección Nacional de Pachakutik
“ser consecuentes con los Principios Políticos e Ideológicos con los que fueron
creados y en consecuencia debe abandonar inmediatamente de tal pretensión"
de reunirse con sectores de derecha.
La marcha de un sector
del movimiento indígena inició el 2 de agosto en la provincia amazónica de
Zamora Chinchipe y se proyecta arribar a Quito para unirse al paro nacional
convocado por una parte de los sindicatos. Según publicaciones de prensa, a la
movilización que inició en la localidad de El Pangui se le han unido varios
actores como el exdirector del hospital de la Policía, César Carrión, quien
estuvo en un proceso por intento de magnicidio contra el presidente Correa en
el intento de golpe de Estado del 30 de septiembre de 2010 (30-S), el
exasambleísta Cléver Jiménez, sentenciado a 18 meses de cárcel por injurias
contra el jefe de Estado.
También, los
principales líderes de algunos sindicatos del obreros como Mesías Tatamuez,
presidente nacional de la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas
Unitarias de Trabajadores (Cedocut); Nelson Erazo, dirigente nacional de la
Unión General de Trabajadores, entre otros.
Nebot apoya el paro
El alcalde de
Guayaquil, Jaime Nebot, uno de los actores políticos representantes de la
derecha del país suramericano también anunció que apoyará el paro convocado por
los sindicatos y parte del movimiento indígena.
El burgomaestre fue
gobernador de la provincia de Guayas durante el gobierno del fallecido
presidente León Febres Cordero (1984-1988), administración bajo la cual
ocurrieron serias violaciones a los derechos humanos, como consta en el informe
de la Comisión de la Verdad, un organismo creado para investigar este tipo de
hechos.
Andrés Páez llama a
movilizarse el 13 de agosto
El asambleísta Andrés
Páez, actual militante de Creo y ex Izquierda Democrática, protagonizó en días
pasados concentraciones principalmente en la Tribuna de Los Shyris, frente a la
sede de Alianza PAIS en Quito. Desde este sitio fueron realizadas al menos dos
movilizaciones hacia el centro histórico de la capital, para intentar ingresar
a la Plaza de la Independencia y al Palacio de Gobierno (Carondelet), las
cuales terminaron con hechos de violencia que dejaron varios heridos y
cuantiosos daños a la propiedad pública.
Páez por medio de las
redes sociales manifiesta su apoyo a las acciones que, según el régimen, buscan
desestabilizar al gobierno y realiza llamados de respaldo al paro del próximo
13 de agosto.
Otro de los actores
políticos que se han sumado al paro nacional, es el movimiento Juntos Podemos,
liderado por el opositor prefecto de Azuay, Paúl Carrasco, quien en días
pasados se reunió con los alcaldes de Quito, Mauricio rodas y Jaime Nebot para
-según dijeron- analizar la situación política del país.
Esto mientras el
gobierno sigue sumando el respaldo de sindicatos, profesionales de la salud,
más de 140 alcaldías, organizaciones indígenas de base, afroecuatorianos, entre
otros sectores que apoyan la administración del presidente Correa, el proceso
democrático y la estabilidad política en el país andino, así como el proceso de
revolución iniciado desde 2007 y el Diálogo Nacional por la Equidad y la
Justicia Social.
pc/jv