Li Hejun, fundador y director ejecutivo de la compañía Hanergy, fabricante de tecnología de energía solar, se vio a finales de mayo en una difícil situación, ya que la empresa perdió 18.600 millones de dólares, un 47% de su valor en el mercado, en aproximadamente una hora. Tras la fuerte caída de las cotizaciones la participación de Li se redujo en 15.000 millones de dólares, escribe CNN Money.
Más tarde se supo que Li había aumentado su propia posición
corta en Hanergy pocos días antes de la caída. Se trata de una técnica de
comercio de venta corta que consiste en vender un activo que no se posee
prestándolo con la idea de obtener beneficio al volver a comprarlo pero a un
precio más bajo.
Desde entonces, la Comisión de Valores y Futuros de Hong
Kong ha confirmado que está investigando a la empresa. Hanergy guarda silencio
sobre el tema, mientras las preguntas siguen multiplicándose.
Wang Jianlin, Dalian
Wanda Group
Dalian Wanda Group es un conglomerado chino que pasa por ser
el operador de cadenas de cines más grande del mundo. Su AMC Entertainment está
siendo investigado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos a causa de
una práctica de anti-competencia. Movidos por esta práctica, las salas dicen a
los estudios de cine de Hollywood que no van a proyectar ciertas películas si
los competidores situados en sus cercanías también van a hacerlo.
AMC es una de las cadenas más grandes de EE.UU. con 4.972
pantallas. Los cines más pequeños aseguran que la empresa se ha valido de dicha
táctica para robarles el negocio.
Se estima que la fortuna de Wang ascendía en febrero a
25.000 millones, lo que le convierte en el segundo hombre más rico de China.
Jack Ma, Alibaba
Alibaba, una de las mayores compañías dedicadas al comercio
electrónico en Internet del mundo, se vio recientemente en el centro de la
polémica debido a una plaga de falsificaciones en sus plataformas de compras.
Alibaba se ha comprometido a luchar contra este
"cáncer", como lo ha descrito el cofundador de la empresa Jack Ma,
desmontando millones de listados de productos e introduciendo una política de
"tres strikes" para los vendedores de Taobao, uno de los sitios de
compras de Alibaba.
El Gobierno chino ya emitió este año un informe que acusaba
a Alibaba de hacer la vista gorda ante la actividad ilegal y de no controlar
sus mercados en Internet. De acuerdo con la Administración Estatal de Industria
y Comercio (SAIC, por sus siglas en inglés), la compañía dejó a determinadas personas
vender productos falsificados.
Si bien el informe fue finalmente retirado del sitio web de
SAIC, el escándalo enfureció a los inversores. No en vano, Alibaba se enfrenta
a una demanda colectiva en EE.UU. por no revelar a los inversores que se reunieron
con el regulador.
La empresa también ha sido demandada por segunda vez por
Kering, un grupo de marcas de lujo que incluye Gucci e Yves Saint Laurent, por
falsificaciones. Este año las acciones de Alibaba cayeron en Nueva York un 13%.