Con una "inversión descomunal" de 46.000 millones
de dólares en proyectos de infraestructura de Pakistán, China planea crear una
nueva versión de la Ruta de la Seda, explica el periodista Samuel Oakford.
actualidad.rt - Con el Corredor Económico China-Pakistán (CPEC, por sus
siglas en inglés), que consiste en una red de autovías, carreteras y proyectos
de infraestructura que se extenderán por miles de kilómetros entre el puerto pakistaní
de Gwadar y la región china de Sinkiang, "Pekín pretende transformar las
rutas de comercio mundial y aumentar su influencia en Asia Central y
Meridional", escribe el periodista Samuel Oakford en un artículo publicado
en el portal de noticias Vice.
La inversión que supone la realización del proyecto, 46.000
millones de dólares, "es una suma extraordinaria" para Pakistán, que
durante el año fiscal de 2013 recibió tan solo 1.460 millones de dólares en
inversiones extranjeras directas, subraya el autor en su artículo titulado
'China planea reconstruir la Ruta de la Seda y transformar las rutas del
comercio mundial'.
Al mismo tiempo, dado que EE.UU., que también ha realizado
inversiones importantes desde el 11-S, sigue teniendo mala imagen entre muchos
pakistaníes, el refuerzo de las relaciones con China podría convertirse en una
opción atractiva.
Además, a diferencia de EE.UU., cuyas inversiones tienen
principalmente fines militares, el desembolso chino está destinado a proyectos
de los que se podrían beneficiar millones de pakistaníes. En concreto, los
proyectos energéticos, que tienen como objetivo duplicar el acceso a la
electricidad, representan 34.000 millones del total.
"Los pakistaníes ven la inversión china con gran
alegría", asegura Ayesha Jalal, director del Centro de Estudios de Asia
del Sur y del Océano Índico de la Universidad Tufts. El primer ministro de
Pakistán, Nawaz Sharif, se ha hecho eco de esta idea y se refiere a las
relaciones amistosas con el gigante asiático como a "la piedra angular de
la política exterior de Pakistán".