La mayor estructura jamás hallada en nuestro universo es un
agujero gigante de 1.800 millones de años luz de diámetro, según revela un
nuevo estudio. El hallazgo podría indicar la existencia de 'físicas exóticas'
desconocidas para la ciencia.
Cuando estudiaban una área gigante del espacio demasiado fría y raramente vacía, un grupo de astrónomos internacionales descubrieron un así llamado 'supervacío' de 1.800 millones de años luz de diámetro relativamente cerca de nuestro sistema solar: a unos 3.000 millones de años luz de nosotros. Según István Szapudi, científico de la Universidad de Hawaii que encabeza el estudio, "se trata de la mayor estructura individual jamás identificada por la humanidad", informa 'The Guardian'.
El llamado 'punto frío' fue descubierto en la zona hace 10 años y su hallazgo asombró a los investigadores, pues la teoría del Big Bang no prevé zonas frías de tales dimensiones. El nuevo estudio sugiere que este 'punto frío' puede ser explicado gracias a un vacío gigante en su centro que drena la energía de la luz que lo atraviesa.
No se trata de un vacío en el sentido exacto, sino de una
región gigante un 20% más vacía que otras partes del universo. Los astrónomos
han llegado a la conclusión de que allí 'faltan' alrededor de 10.000 galaxias.
Se trata de un hallazgo único, debido a la rara combinación
de su tamaño y de su vacuidad, que se da muy pocas veces en el espacio, según los
astrónomos. No obstante, el hallazgo agranda el misterio del 'punto frío', ya
que no se puede explicar totalmente su temperatura baja.
Además, los científicos aún no saben explicar a ciencia
cierta cómo se ha formado la estructura. Por un lado, la esctructura puede
indicar la existencia de "físicas exóticas", aún desconocidas. Por
otro lado, es probable que el supervacío que coincide con el 'punto frío' puede
ser explicado con la expansión creciente del universo, gracias a que los
fotones reducen la velocidad y, por lo tanto, se enfrían mientras cruzan el
vacío. Finalmente, la existencia de dicha estructura evidencia la existencia de
energía oscura, explica el profesor Carlos Frenk de la Universidad de Durham',
citado por 'The Guardian'.