El programador ruso Valeri Spiridónov, la primera persona en
el mundo que se someterá al un trasplante de cabeza, explica cómo se atrevió a
involucrarse en una operación semejante.
"Este experimento es un gran avance [científico]. Es
equivalente al vuelo de Gagarin. Objetivamente, no tengo los recursos
materiales para pagarlo, pero estoy dispuesto a entregarme a la ciencia",
señala.
Cuando tenía un año a Spiridonov le fue diagnosticado una
pérdida muscular rara debido a la enfermedad de Werdnig-Hoffman, que afecta a
las neuronas de la médula espinal y hace que la persona quede completamente
inmovilizada. Su enfermedad progresa con cada día que pasa.
Según el científico italiano Sergio Canavero, autor de esta
técnica quirúrgica, la clave de la operación pasa por la realización de un
corte mínimamente traumático de la médula espinal practicado con un cuchillo
extrafino en condiciones de hipotermia profunda para proteger las estructuras
cerebrales.
Según el médico, eligieron a Valeri Spiridónov porque, en
primer, lugar esta operación ha sido desarrollada especialmente para pacientes
de este tipo.
La clave del éxito reside en la posibilidad teórica de
fundir las prolongaciones nerviosas en una "cuerda" mediante el uso
de fusógenos o selladores de membrana.
El proceso consiste en unir la parte de la espina dorsal en
la cabeza separada con la parte de la espina dorsal que queda en el cuerpo
receptor usando una sustancia química. Después los cirujanos suturan los
músculos y conductos sanguíneos.