"Empecé a
trabajar más tiempo, no he tenido una gripe durante los últimos dos años",
admitió Brushkov. "Después de experiencias exitosas en ratones y moscas de
la fruta, pensé que sería interesante probar el cultivo inactivado de la bacteria",
señaló el científico al rotativo 'The Siberian Times'.
actualidad.rt -
"No es realmente un experimento científico, así que no puedo describir
profesionalmente los efectos. Pero tengo muy claro que no he cogido la gripe
durante dos años. Quizás ha habido algún efecto secundario, pero debe haber un
equipo médico especial para detectarlos. Por supuesto, este tipo de
experimentos debe llevarse a cabo en la clínica, con el equipo y las
estadísticas especiales. Entonces podríamos hablar con claridad acerca de todos
los efectos", destacó Brushkov.
El científico cree que
no es la primera persona con esta bacteria en el cuerpo. Brushkov explicó que a
medida que el permafrost se descongela, estas bacterias entran en el medio
ambiente, en el agua, por lo que la población local, los yakutos, llevan mucho
tiempo ingiriendo estas células con el agua y, asegura, parecen vivir más que
otros pueblos.
El científico
descubrió esta sorprendente bacteria viva ―cuya edad es de varios millones de
años― en los sedimentos geológicos del permafrost siberiano. Brushkov cree que
sus genes le proporcionan una esperanza de vida muy alta y la protegen de
posibles daños.
Actualmente los
investigadores no saben exactamente cómo funcionan los mencionados
microorganismos, pero insisten en que su impacto es evidente. Por ejemplo, los
ratones en los que se experimenta viven más tiempo e incluso al envejecer
continúan reproduciéndose con frecuencia. En ese sentido, se estima que la
bacteria tiene la capacidad de mejorar el sistema inmunológico.