El gigante de la biotecnología Monsanto acumula numerosas
denuncias por los daños para la salud y las consecuencias negativas para el
medio ambiente que conlleva la modificación genética de semillas y cultivos que
practica la empresa.
'El Ciudadano' recopila siete motivos por los que la empresa
biotecnológica Monsanto Corporation es nociva para nuestra salud:
1. Agente Naranja: En los años 60, la compañía era uno de
los fabricantes y el principal beneficiario de este producto utilizado como
arma química en la guerra de Vietnam. Como resultado del uso del agente
naranja, alrededor de 400.000 personas murieron o sufrieron mutilaciones,
500.000 niños nacieron con malformaciones y un millón de personas quedaron
discapacitadas o sufrieron problemas de salud. EE.UU. ha permitido a Monsanto y
a otras empresas químicas realizar apelaciones y recibir protección ante las
querellas y denuncias de los veteranos de guerra que alegaron daños y
perjuicios por estos hechos.
2. Aspartame: Ya en el año 1994 el Departamento de Salud y
Servicios Humanos de EE.UU. (HHS, por sus siglas en inglés) publicó un informe
que enumeraba 94 problemas de salud causados por este edulcorante no calórico.
Se ha demostrado que causa daños graves que se acrecientan mediante el consumo
prolongado, destruyendo áreas vitales del cuerpo humano. Sin embargo, el
aspartame sigue presente con otras denominaciones en muchos productos
comestibles habituales.
4. Somatotropina bovina recombinante (rBGH): También llamada
hormona de crecimiento bovino, es una hormona modificada genéticamente por la
empresa que se inyecta en las vacas para aumentar la producción de leche. Según
varias investigaciones, existe un vínculo entre la leche rBGH y el cáncer de
mama, cáncer de colon y cáncer de próstata en seres humanos. La hormona está
prohibida en Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Japón, Israel, la UE y
Argentina.
5. RoundUp: Es el herbicida más popular del mundo. Se
utiliza en cultivos genéticamente modificados que resisten al glifosato y sus
residuos siguen presentes en los alimentos que más tarde se distribuyen en los
supermercados. Según un estudio realizado por los oncólogos suecos Lennart
Hardell y Mikael Eriksson, este herbicida está directamente relacionado con el
cáncer y el linfoma no-Hodgkin.
6. Cultivos modificados genéticamente: Son creados por
Monsanto mediante la manipulación genética del maíz, el algodón, la soja y la
canola con el ADN de una fuente extraña. Estos cultivos están diseñados para
ser resistentes a grandes dosis del herbicida RoundUp, y como consecuencia
están generando la aparición de 'supermalezas', también resistentes a los
herbicidas. Por este motivo, el herbicida RoundUP es cada vez más fuerte.
7. Semillas Terminator: La tecnología de Monsanto produce
granos estériles incapaces de germinar. Esto obliga a los agricultores a
comprar semillas de Monsanto cada año en lugar de guardar y reutilizar las
semillas de sus cosechas, como se hacía tradicionalmente. Las semillas
Terminator, y posteriormente las flores, producen la llamada 'polinización
cruzada', ya sea por el viento o mediante las abejas (las que todavía no han
muerto por culpa del RoundUp), y contaminan cultivos aledaños no estériles.
De
esta manera Monsanto pone en peligro las existencias de semillas naturales en
el futuro. Finalmente, una contaminación total otorgaría el control del
suministro de alimentos a nivel mundial a Monsanto y la industria de los
transgénicos.