La compañía alemana
admitió que instaló intencionadamente en sus vehículos un 'software' programado
para cambiar los motores a un modo más limpio durante las pruebas oficiales de
emisiones, informó 'The New York Times'. Cuando terminan esas revisiones, los
coches pueden ir con más fuerza y emitir gases que superan hasta 40 veces el
límite legal de contaminación.
actualidad.rt - En un
comunicado, el grupo anunció que ha destinado 6.500 millones de euros para
cubrir las consecuencias del escándalo, que socava su reputación y afecta al
precio de sus acciones, cuyo cotización ha registrado una nueva caída de más
del 15% este martes.
"Establecimos una
desviación notable entre los resultados de las pruebas y el uso real
exclusivamente en este tipo de motor [EA 189]. Volkswagen está trabajando
intensamente para eliminar estas desviaciones a través de medidas
técnicas", indicó el fabricante.
La firma germana
aseguró que los nuevos vehículos con motores de EU 6 diésel que actualmente se
venden en la Unión Europea cumplen los requisitos legales y las normas
ambientales.
Este fraude fue
desvelado por la agencia medioambiental estadounidense. A raíz del escándalo,
otros países como Italia, Francia, Alemania y Corea del Sur también van a
investigar los niveles de emisión de los vehículos diésel de Volkswagen.